Isabel Barrajón en la pancarta de la Mesa de solidaridad con las personas migrantes
CCOO PV participó este domingo en la marcha convocada con motivo del Día Internacional de las Personas Migrantes para recordar al Gobierno de España y al resto de gobiernos europeos que las migraciones son el resultado de los desajustes económicos, sociales, políticos y medioambientales causados por las intervenciones, el expolio y el saqueo por parte del Norte a los países del Sur.
Las personas migrantes tienen derecho a una vida digna, a la libre circulación, a la salud, a la vivienda, al trabajo, a la no discriminación. Contribuyen al desarrollo social, económico y cultural de España. Pero sus derechos son constantemente vulnerados por el Estado español.
Las entidades organizadoras reclamaron la regularización de todas las personas que viven en situación administrativa irregular, unas circunstancias que padecen miles de personas en España. Ningún ser humano es ilegal.
Además, reclamaron el cierre total, definitivo y permanente de todos los Centros de Internamiento de Extranjeros, CIE; centros que operan como instituciones de represión para personas migrantes cuya situación administrativa no está regularizada. Las detenciones se realizan con prácticas como las paradas policiales por perfil racial o las redadas selectivas en zonas de tránsito de personas migrantes, que además de ser profundamente racistas, son acciones ilegales.
Frente a la situación de emergencia de llegadas a Canarias, reclamamos vías migratorias seguras con garantía de derechos. Debe ser atendida y relatada como una crisis humanitaria, no como una “avalancha” o una “oleada”. La acogida y respuesta debe ser digna y humana.
Migrar no es un delito
Las entidades convocantes defendieron la eliminación de la militarización de las fronteras, suprimiendo los acuerdos de externalización de la gestión de las mismas y los contratos millonarios con empresas como FRONTEX. Este enfoque de política (anti)inmigratoria solo beneficia a las élites económicas reaccionarias. Migrar no es un delito.
Denunciaron que el Pacto Europeo de Migraciones, tal y cómo se está articulando, será un instrumento para perpetuar la criminalización de las migraciones. Los estándares de protección para las personas solicitantes de protección internacional se reducirán, y se legitimarán devoluciones exprés y devoluciones ‘en caliente’, incluso con menores de edad, una práctica totalmente ilegal.
La manifestación exigió el alto el fuego definitivo en Gaza, la supresión de venta de armas al Estado de Israel, el fin del apartheid y de la ocupación genocida perpetrado sobre Palestina y que se juzguen estos crímenes como crímenes de lesa humanidad.