Comisiones Obreras del País Valenciano | 29 marzo 2024.

Octubre prolonga el mal empleo de Alicante

    El paro registrado continúa subiendo aunque mejora la cifra de afiliación a la seguridad social. Las mujeres suponen ya el 59% de las personas registradas como paradas en Alicante. El agotamiento de las políticas de empleo requieren medidas urgentes, y la primera debe ser la retirada de la reforma laboral.

    05/11/2019.
    Concentración Trabajo Decente Alicante

    Concentración Trabajo Decente Alicante

    Octubre termina con 2.069 personas más inscritas en el desempleo, sin embargo, la afiliación a la seguridad social crece (+3.502 en el mes; +15.858 en el año). No son datos contradictorios, el dato de paro se refiere a personas sin empleo que inscritas en el registro público, una parte de las personas que salen del listado no lo hacen por encontrar empleo, y una parte de las que sí encuentran trabajo no estaban inscritas en el desempleo. La tendencia continúa siendo la de recuperar empleo, eso sí, en unas condiciones más precarias. Nos da la pista el dato de contratación que aumenta de forma significativa respecto al mes anterior, aunque básicamente a base de temporalidad. Si recurrimos a los datos, todavía muy recientes, de la EPA del tercer trimestre de este año, observamos que en cómputo anual, hay un aumento de la contratación total, sin embargo, el peso de la contratación a tiempo parcial aumenta, es decir, en 2018 (tercer trimestre) la contratación parcial suponía el 15’4% del total, mientras que en 2019, la parcialidad supone el 16’8% del total: la calidad del empleo que se crea (al menos lo que se registra en contrato) se reduce. Además, en la misma EPA observamos que hay un aumento del contrato indefinido, pero el que sale más beneficiado es el contrato indefinido a tiempo parcial que en 2018 suponía el 10’9%, mientras que en 2019 llega al 15’2%. Es decir, hay más personas trabajando pero con una importante rotación y con contratos de cada vez peor calidad.

    La primera conclusión es la que ya venimos señalando estos meses: la reforma laboral está agotada, fue una mala medida en el peor momento y ha generado un daño al sistema de derechos laborales desconocido en democracia, pero, actualmente, supone, además, un lastre inaceptable que está afectando a la calidad de la negociación colectiva y al precio del despido. La reforma laboral es un “zombi” que es urgente eliminar. El próximo domingo, en las urnas, trabajadoras y trabajadores debemos lanzar un mensaje claro: los partidos políticos deben comprometerse a la eliminación inmediata de la reforma laboral.

    Por lo demás, la evolución del paro registrado ha sido similar a la del año pasado y a la de octubre de 2017, en estos tres meses, el paro subió por encima de las dos mil personas. Además, en lo que llevamos de año, el paro se ha recortado en 3.440 personas, mientras que en 2018, en ese mismo periodo, el descenso del paro registrado fue más del doble, llegando a 7.785 personas menos inscritas en el paro. Lo que sigue abundando en la desaceleración productiva y en la necesidad de erradicar la reforma laboral. Desde 2007, el aumento del paro registrado supone, a último día de octubre pasado un aumento de 58.430 personas, lo que señala la incapacidad de la reforma laboral y el fracaso de las políticas activas de empleo en el objetivo de construir un empleo digno en cantidad y calidad.

    El sector servicios es el que registra el mayor aumento del paro registrado como viene siendo habitual. De todas formas, hay que destacar que, tras la pérdida de empleo de los sectores de industria y construcción (recordemos la indecente práctica del sector industrial de despedir en agosto a buena parte de la plantilla, costumbre a la que este año se incorporó el sector de la construcción) estos sectores reducen su paro para ir recogiendo, al menos, a parte de las personas que despidieron. De esta forma, la reducción del paro en industria es la mayor del país, y en construcción la segunda mayor después de Valencia. No son cifras muy significativas (-435 y -340, respectivamente) pero sí señalan, en un marco estatal de aumento del paro, una tendencia que pone de relieve ese uso inadecuado del despido para mejorar la cuenta de resultados.

    Como es habitual, el mayor aumento del paro lo sufren las mujeres que acaparan el 69’7% de la subida, suponiendo ya el 59% de las personas inscritas en las listas del desempleo.

    La lenta recuperación cuantitativa del empleo debe dar paso a una recuperación de la calidad del empleo y a un aumento de la velocidad de la recuperación. Esto pasa, necesariamente, por la eliminación de la reforma laboral. Es necesario un empleo decente en un sistema productivo sostenible social y medioambientalmente. Es el momento de recuperar derechos y garantizar un marco legal que consolide derechos como el empleo de calidad y la protección social. Este domingo, trabajadoras y trabajadores deben acudir a votar para conseguir un Parlamento progresista que articule los cambios políticos, económicos y sociales que necesita nuestro país.