Comisiones Obreras del País Valenciano | 20 abril 2024.

Abril culmina el peor arranque del año para el empleo en Alicante desde 2013

    Reducción del paro registrado basada en la contratación temporal (que sube tanto en cómputo mensual como anual, mientras se reduce la indefinida) y, por lo tanto, en el empleo típico de estas fechas y del mercado productivo alicantino: estacional, coyuntural y volátil. Seis de cada diez personas en situación de paro registrado son mujeres.

    06/05/2019.
    Cabecera manifestación 1º de Mayo en Alicante

    Cabecera manifestación 1º de Mayo en Alicante

    Reducción del paro registrado basada en la contratación temporal (que sube tanto en cómputo mensual como anual, mientras se reduce la indefinida) y, por lo tanto, en el empleo típico de estas fechas y del mercado productivo alicantino: estacional, coyuntural y volátil. La reducción de 3.777 inscripciones en las listas del paro registrado no evita que el primer cuatrimestre de ese 2019 sea el que menos paro ha recortado desde 2013, lo que insiste en la doble apreciación que venimos subrayando los últimos meses: se consolida la desaceleración productiva y que los efectos de las reformas laborales han tocado techo, se ha precarizado tanto el empleo, se han recortado tantos derechos que apenas se pueden soportar más recortes sin caer en la legalización abierta de la explotación laboral. Las reformas se diseñaron para precarizar el empleo facilitando el despido barato, la reducción de derechos laborales (negociación colectiva…) y la generalización de la contratación de poca calidad (parcialidad, temporalidad, rotación y corta duración de la relación laboral). Esta situación manifiesta por un lado la urgente necesidad de modificar el marco de relaciones laborales suprimiendo esas reformas laborales y, por otro, la importancia de abordar, de una buena vez, el necesario cambio de patrón productivo provincial.

    La reducción del paro generado por la crisis y las medidas anticrisis sigue yendo a un paso muy lento, desde 2007 se arrastra un aumento de 61.235 personas en situación de paro. Esta situación debe hacer reflexionar a quien mantiene un discurso de salida de la crisis. La mejora de los datos macroeconómicas no ha llegado al empleo ni en su cantidad ni en su calidad. Es necesario insistir en la redistribución de la mejora económica y, para empezar, hay que devolver a trabajadores y trabajadoras los derechos que se le han venido arrebatando en los últimos años. Medidas como la subida del SMI son un paso en la buena dirección, pero es urgente acabar con las reformas laborales. Hay que señalar que la evolución del empleo sigue siendo tan previsible como siempre. La estacionalidad sigue marcando el paso del empleo que se está viendo perjudicada por la ralentización productiva; sin embargo, no se ha producido el efecto de despidos en masa que anunciaron los catastrofistas y agoreros tras la subida del SMI. Al contrario, se está beneficiando a un buen número de trabajadoras y trabajadores y se está mejorando la recaudación de la Seguridad Social.

    El inicio de la temporada turística lo marca la Semana Santa, que, en función de cuándo caiga de marzo o abril, supone una reducción significativa del paro registrado. Este mes de abril pasado es el que menos reduce de los meses en los que cae este periodo vacacional desde 2013. Algo ha tenido que ver el mal tiempo que ha hecho los días de Semana Santa que, como señaló HOSBEC, supuso una reducción de la ocupación hotelera; aunque se ha compensado con la preparación del puente de mayo. Esta dependencia del mercado productivo a un sector servicios ligado a la situación del clima es una debilidad de esta provincia que debe ser tratada reforzando la desestacionalización del turismo y reduciendo la dependencia productiva fortaleciendo la industria tecnológica y las energías sostenibles.

    Al ser un empleo estacional y precario las mujeres reducen su paro registrado por encima del de los hombres, aunque siguen suponiendo el 59’7% del total del paro en Alicante. Por sectores, como siempre, el sector servicios marca la evolución general, su reducción de 3.849 personas inscritas, junto con la registrada en agricultura (-223) compensan las subidas de industria (+85), construcción (+53) y del colectivo sin empleo anterior (+157).

    En relación a los datos de prestaciones referidas al mes de marzo, señalar que, la reducción del número de personas en situación de paro registrado se refleja en una reducción del número de personas beneficiarias de prestación por desempleo. En ese mes de marzo, la reducción se centró en las prestaciones contributivas lo que ha hecho que la calidad de la prestación media se reduzca en 8’9 €/mes. Hay que señalar que, con los datos de paro registrado, tan sólo cobran alguna prestación o subsidio el 50’7% de personas inscritas, si consideramos la gran cantidad de personas en situación de paro y disponibles para trabajar que no pasan por las listas del paro, la realidad de la cobertura de la prestación por desempleo baja notablemente y, seguramente, por debajo, o en el entorno del 40%. La prestación media en Alicante se situó en marzo en 772’40 €/mes lo que se sitúa por debajo del mileurismo; pero, además, sólo el 41’4% de quienes perciben prestación lo hacen por una contributiva, lo que hace que la mayoría de las personas en paro que cobran algún tipo de subsidio estén, directamente, por debajo del umbral de la pobreza. Es necesario aumentar la cobertura de protección a la persona en desempleo y la calidad de esa protección.

    Tras lo últimos resultados electorales, la orientación política no puede ser sino reforzar las políticas que prioricen los derechos de las personas y que reviertan los recortes sociales impuestos en los últimos años. Las cientos de miles de personas que tomaron las calles el pasado 1º de Mayo van en la misma dirección: Primero las personas.