Comisiones Obreras del País Valenciano | 28 marzo 2024.

La triple brecha salarial de la mujer en Alicante

    Salario, prestaciones, pensiones, tres de las brechas que separan mujeres y hombres en un mercado laboral lastrado, además, por la precariedad y la economía sumergida que, también, afectan más a la mujeres. La ocupación es inferior en mujeres, así como su salario medio anual. Las mujeres alicantinas sólo son más que los alicantinos en los tramos de salarios más bajos.

    22/02/2019.
    Cartel Huelga Feminista 8M

    Cartel Huelga Feminista 8M

    Que las mujeres cobran menos que los hombres es algo sabido, reconocido e insuficientemente resuelto en nuestra sociedad. Sin embargo, reducir la brecha que separa derechos entre mujeres y hombres al salario es contar sólo una parte de la verdad. Las brechas son múltiples y diversas, ahora las vamos a considerar agrupadas en tres aspectos:

    salarial,

    protección por desempleo

    y pensiones.

    Veamos algunos datos:

    Con los últimos datos disponibles, el salario medio de las mujeres es un 18’67% inferior al de los hombres en Alicante. Además, hay 55.294 asalariados más que asalariadas. Así los 350.491 hombres asalariados de Alicante tuvieron un salario medio anual de 16.864€, mientras que las 295.197 mujeres asalariadas recibieron un SMA de 13.716€. Primera gran brecha: menos mujeres asalariadas que, además, tienen un salario medio inferior.

    Pero ahí no termina el asunto: 169.956 hombres (el 48’5% del total de hombres) cobran hasta 1’5 veces el SMI. Mientras que 179.044 mujeres (el 60’65% del total de mujeres) cobran hasta 1’5 veces el SMI. En los salarios más bajos, las mujeres son mayoría, y suponen 6 de cada 10 mujeres asalariadas.

    Hay 16.661 hombres (el 4’75% del total de hombres) que perciben un salario que es, como mínimo, cinco veces el SMI). Mientras que 8.300 mujeres (el 2’81% del total de mujeres) perciben esa retribución. En los salarios más altos, las mujeres son muchas menos que los hombres (menos de la mitad que estos).

    Por lo que insistimos que la brecha más dura la sufren las mujeres trabajadoras de niveles y categorias profesionales más bajas. La brecha salarial más importante no la sufren las directivas y gerentes sino las mujeres de las clases populares.

    La brecha salarial continúa por los sectores productivos. En el sector que más personas ocupa en Alicante (comercio, transportes,…) la brecha supone que el salario de las mujeres es inferior al de los hombres en un 27’13%. Una diferencia similar a la que se produce en el sector de Entidades Financieras y Aseguradoras (brecha del 27’14%), aunque en este sector los salarios son más altos. En el sector de comercio y transportes hay 87.374 hombres que perciben un salario medio anual de 16.149€; mientras que las 69.452 mujeres se quedan en un SMA de 11.768. Hay que señalar también la importante brecha salarial en industria que supone que las mujeres ganen el 32’77% menos que los hombres.

    Esta brecha en los salarios se prolonga en dos brechas relacionadas con la primera: en la protección por desempleo y en las pensiones.

    En relación al desempleo, la prestación media anual en hombres es de 3.057€/año, mientras que la de las mujeres es de 2.782€/año. La prestación de estas es un 9% inferior a la de aquellos.

    En pensiones, la brecha es superior: hay 167.499 hombres que perciben una pensión cuya cuantía media anual es de 13.676€/año; mientras que las 165.507 mujeres pensionistas cobran 9.977€/año. Las mujeres reciben un 27’05% menos que los hombres en su pensión.

    En relación a las brechas en prestaciones y pensiones, hay que señalar que esas cifras nos permiten hacer una revisión y análisis histórico de cómo la marginalidad social a la que se somete mayoritariamente a las mujeres, su posición de género en una sociedad que produce desigualdades para hacer viable al sistema economico capitalista, repercute en la faceta laboral.

    La protección por desempleo de las mujeres es la mínima posible por la precariedad (temporalidad, parcialidad, economía sumergida…) que sufren. Que se prolonga a la hora de cobrar una pensión al haber padecido una carrera de cotización llena de altibajos.

    Además, desde consideramos que hay pensiones muy bajas, como la de viudedad que reciben mayoritariamente las mujeres y que llevan al empobrecimiento de una cohorte de mujeres que se dedicaron toda la vida a cuidar y sostener la viabilidad del sistema social y económico. Por lo que consideramos muy insuficientes e injustas esas pensiones.

    Por todo esto desde CCOO insistimos en la necesidad de acometer cambios profundos en la configuración del mundo del trabajo que pasa por diversificar los sectores productivos, dignificar los convenios colectivos de los sectores feminizados, incluir en la agenda política y del gobierno leyes contra la desigualdad salarial, contra la economía sumergida. Establecer un reconocimiento social a todo el sector de la economía de los cuidados, aumentar las pensiones públicas y fortalecer el sistema público de protección al desempleo, políticas educativas que combatan el machismo en todos los ámbitos de la vida.